A diferencia de la calefacción que consiste en la producción de calor, la refrigeración no consiste en la producción de frío, si no en la extracción del calor existente en el lugar que vayamos a refrigerar. La refrigeración como la entendemos se basa en un ciclo frigorífico llevado a cabo por un refrigerante que es accionado por un compresor, y por tanto conlleva un consumo eléctrico. Existen otros métodos que nos ayudan a combatir el calor como veremos a continuación.
Aire acondicionado
El aire acondicionado es el equipo de refrigeración más utilizado para el hogar, funciona extrayendo el calor de nuestro hogar y expulsándolo al exterior, utilizando energía eléctrica. Este sistema funciona gracias a un refrigerante que realiza un ciclo termodinámico cerrado, su funcionamiento se basa en una bomba de calor.
Gracias a la bomba de calor, el aire acondicionado nos permite obtener refrigeración en verano y calefacción en invierno, convirtiéndolo en el equipo de climatización más utilizado en los hogares. En cuanto a tipos existen muchos modelos; fijos, portátiles, de ventana, centralizados, etc.

Ventiladores
Los ventiladores son los sistemas para combatir el calor que más se han usado, hacen circular el aire de la habitación mezclando el aire más frio que esta más cercano al suelo con el resto del aire, además de producir una corriente que favorece la evacuación de calor de nuestro cuerpo a través de nuestra piel ayudándonos a mantener una temperatura corporal menor que sin ventilador.
Las ventajas que tienen los ventiladores son que tienen un menor consumo eléctrico y son más versátiles pues son más fáciles de mover de un lugar a otro.

Nebulizador
Los nebulizadores son sistemas que pulverizan agua muy fina al ambiente haciendo que esta extraiga calor del ambiente al evaporarse, se utilizan sobre todo en exteriores para la refrigeración en terrazas.
Estos sistemas son sencillos, consisten en una distribución de tuberías colocadas en el techo y difusores muy finos, por los que se hace circular agua a presión mediante una bomba.

Refrigeración evaporativa
Los sistemas de refrigeración evaporativa aprovechan la absorción de calor del agua cuando esta se evapora para extraer el calor del aire de la vivienda. Estos sistemas funcionan haciendo pasar una corriente de aire por unos filtros húmedos o superficies mojadas, haciendo que el aire caliente haga evaporar parte del agua del filtro y esta a su vez extraiga calor del aire, impulsándolo hacia la estancia a menor temperatura pero con mayor humedad.
Estos sistemas son efectivos en lugares de clima seco, pues en lugares con humedad alta, al contener el aire una alta cantidad de vapor de agua este ya no puede absorber más agua en el filtro y por lo tanto no se produce la evaporación que lo enfría, o al menos en menor cantidad, disminuyendo por tanto su efectividad.
