No renovables

Los combustibles no renovables son aquellos que provienen de combustibles fósiles y los que la mayoría usamos actualmente para satisfacer nuestras necesidades energéticas. Los principales combustibles que usamos para el hogar son gas natural, propano, butano y por otro lado diésel o gasolina. Estos combustibles no los podemos generar por nuestra cuenta pero nos pueden servir de utilidad para cubrir los huecos de producción energética que tengamos o cuando esta no sea suficiente para cubrir nuestra demanda.

Diesel y gasolina

El diésel y la gasolina son dos combustibles líquidos procedentes del refinado del petróleo, son los combustibles más utilizados en el día a día debido a su gran densidad de energía por centímetro cúbico y facilidad para el transporte y suministro, pues existe una gran red de distribución a nivel global.

Para uso doméstico estos combustibles tienen principalmente dos usos:

  • Calefacción: calefacción del hogar mediante una caldera en la que se quema el combustible para producir calor para la vivienda.
  • Empleo en un motor de combustión: ya sea para un grupo electrógeno, vehículos, maquinaria agrícola, herramientas, etc.

A continuación se muestran algunas comparaciones entre el diésel y la gasolina:

  1. Costo: El precio del diésel y la gasolina puede variar según la ubicación y los precios del mercado. En general, el diésel suele ser más caro que la gasolina, aunque la diferencia de precio puede variar en función de la ubicación y los precios del mercado.
  2. Eficiencia: En general, los motores diésel son más eficientes que los motores de gasolina, lo que significa que pueden convertir más de la energía contenida en el combustible en trabajo útil. Esto significa que los vehículos con motores diésel suelen tener una mayor autonomía y menor consumo de combustible que los vehículos con motores de gasolina.
  3. Rendimiento: Los motores diésel suelen tener un mejor rendimiento en términos de potencia y torque que los motores de gasolina. Esto significa que los vehículos con motores diésel pueden ser más adecuados para tareas pesadas, como remolcar o transportar cargas pesadas. Sin embargo los motores de gasolina son más sencillos y su reparación suele ser menos costosa.
  4. Impacto ambiental: La quema de diésel y gasolina libera gases de efecto invernadero y otros contaminantes, lo que puede tener un impacto negativo en el medio ambiente y la salud humana. Sin embargo, los vehículos diésel suelen emitir menos gases de efecto invernadero por kilómetro recorrido que los vehículos de gasolina, aunque emiten más partículas finas contaminantes y óxidos de nitrógeno.
  5. Almacenamiento: El diésel es más estable que la gasolina y tiene una vida útil más larga. Además, el diésel es menos inflamable y menos volátil que la gasolina, lo que lo hace más seguro para almacenar. Sin embargo, el diésel puede ser más propenso a la oxidación y la formación de ácidos, lo que puede afectar su calidad y su capacidad para ser utilizado como combustible. Por otro lado, la gasolina es más volátil y menos estable que el diésel, lo que la hace más propensa a evaporarse y a perder su calidad con el tiempo. Sin embargo, la gasolina es más fácil de almacenar y transportar debido a su menor viscosidad y su menor densidad que el diésel.

En conclusión, la elección entre el diésel y la gasolina depende de las prioridades individuales y las condiciones específicas de cada usuario.

Propano, butano y gas natural

Propano, butano y gas natural son tres tipos de combustibles utilizados comúnmente en hogares para cocinar, calentar agua y calefaccionar ambientes. A continuación, se presentan las principales diferencias entre ellos:

  1. Composición química: El propano y el butano son hidrocarburos alifáticos, mientras que el gas natural está compuesto principalmente por metano.
  2. Origen: El propano y el butano se obtienen a partir del petróleo y el gas natural se extrae de yacimientos subterráneos.
  3. Presión de almacenamiento: El propano y el butano se almacenan en cilindros a alta presión, mientras que el gas natural se suministra directamente desde la red de gas.
  4. Poder calorífico: El poder calorífico del propano y el butano es mayor que el del gas natural, lo que significa que proporcionan más calor por unidad de volumen.
  5. Precio: El precio del gas natural es generalmente más bajo que el del propano y el butano.
  6. Disponibilidad: El gas natural se encuentra disponible en la mayoría de las ciudades y pueblos, mientras que el propano y el butano a menudo deben ser entregados en camiones.
  7. Seguridad: El propano y el butano son gases inflamables que pueden explotar si se manejan de manera incorrecta, por lo que es importante seguir las normas de seguridad al manipularlos. El gas natural es menos inflamable y menos peligroso en caso de fugas.

En resumen, la elección entre propano, butano y gas natural para uso doméstico dependerá de varios factores, como el costo, la disponibilidad en la zona, el tipo de instalación y las preferencias personales. Cada uno de ellos tiene sus ventajas y desventajas, por lo que es importante evaluar cuidadosamente las opciones antes de tomar una decisión